miércoles, 16 de febrero de 2011

Despedida del DF

¿Que puedo decir de esa ciudad inmensa que otra vez nos enamoro con su gente y su mundo?. ¿Del sábado a la noche en el Tenampa, para despedirnos con tequila "tradicional", toquesitos y mariachis?. ¿De mañana amplia y calurosa en el Estadio de Ciudad Universitaria (CU) para ver a los Pumas de la UNAM contra las Chivas de Guadalajara?. ¿De últimos tacos al pastor en el Tizoncito del barrio Condesa, a eso de los cuatro de la tarde?. ¿De paseo de domingo con Ana Luisa, Alejandra, Yenny y familia por los parques que enseñan danzon a sus gentes?.
Ya de regreso en Buenos Aires, no puedo mas que agradecer las ultimas 48 horas de magia y cultura, de amistad y risas, de Garibaldis y maestros letristas. En el Tenampa pedimos de nuevo "Acá entre nos" y "Si nos dejan" de José Alfredo y le agregamos las hermosas "Soy lo prohibido" (Roberto Cantoral, creo el autor) e "Y que hiciste" de Mario de Jesús, que voy a copiar en despedida.

viernes, 11 de febrero de 2011

Riviera Maya

A la mas mexicana de las turísticas de la Riviera Maya (Cancun, Playa del Carmen, Tulum), Estado de Quintana Roo, llegamos muertos de día completo de ruinas y cenotes a eso de las diez de la noche. El bus nos dejo en la terminal, un poco a disgusto de nuestra falta de hoteles. Nos hospedamos en el Hotel Plaza Centro (Calle 8 y casi 20), frente a la plaza no tan céntricas del ayuntamiento municipal, contiguo al Café Andrade (Calle 8 y mismísima esquina 20), el lugar que adoptamos en el desayuno de todos los días.
Playa de inmensidad, de mundo. De peregrinar cosmopolita y rubio de Calle Quinta. De camino en bajada por Calle 12, por la nocturnidad de pasarela y estrellas perfumadas, de bares y ruidos. Hay una Playa de día y otra de tarde. Se escucha cuando escribo "Tiburón" de Ruben Blades, lo que me devuelve a la latina música que se siente poco, ya, por aquí. De olor de chubasco pasajero pero eterno que nos acostumbro después de las 4 de la tarde, impidiendo algunos días los últimos rayos de la tarde y la playa hermoso e innegable del sitio, de transmutación de sonido de trompetas, que caen y hacen comienzo de la noche que empieza y nos lleva al Distrito Federal, mañana.

lunes, 7 de febrero de 2011

Merida y Chichen Itza

Lo contrario a Campeche nos pareció Merida, a la que la belleza se le suma lo increíble de la gente, del alma de Yucatan, capital de este Estado mexicano. Ciudad donde el mundo te trastoca, del caminar, de la parva, de los parques, de humedad. Meridiana, gris y verde, el zócalo y catedral dominan sus ansias de ciudad grande, como de otro legado a tener. De trompetas de bolero y campanario, sus verdores se hacen cotidianos entre el caminar del yucateño pueblo. Hay amistad de itsmo, de península inmensa, de sabores generosos de platos ensalsados de rojo y chile. Hay después de todo magia de patrimonio, que quiere quedarse mas días aquí y no puede.
A la ciudad llegamos a la tarde, a eso de las 5, previas 3 horas de viaje desde Campeche. Caminamos con la dificultad de las mochilas a cuestas hasta el Parque Central (Zócalo), donde degustamos un corrido yucateño que nos despertó del sueño con sus chiles, carnes y salsas potentes. Nos hospedamos en el hermoso hotel Dolores Alba (Calle 63 entre 54 y 52), entre cuadros de Frida Khalo, galerías y loros que despiertan las mañanas.

sábado, 5 de febrero de 2011

San Cristobal de las Casas. Campeche

El viaje fue corto desde Puerto Escondido, a pesar del trayecto. Con Alejandro Filio en el auricular cantándonos su "sueño empapado en Tequila y en Revolución". Comimos unas tortas de jamón, de esas que comía el Chavo del 8, en la parada de ruta y el sueño nos despertó a eso de las 7 am en un San Cristóbal nublado, pero sobre todo, muy frió. Nuestro ya espíritu de mar y pacifico, de sol y de playa, lo sintió fuerte. De vuelta al abrigar, de vuelta a la ropa larga. Después de alojarnos en el Place Hostel (Pje. Cintalapa y Dugelay), nos fuimos a desayunar al Zócalo, a la plaza principal, tras recorrer sus tres cuadras peatonales y hermosas de la calle Real Guadalupe, cuando nos esperaba un mundo de pueblo en la unción municipal del mando.
Al rato nos separamos con Guille: él se fue a los Mercados y yo me quede recorriendo el centro, hasta que termine en un café de la otra peatonal, el Andador Eclesiástico, cuando me encontró el saludo de la alcaldesa, sentado, en esa calle. Cuando la procesion pasa con un nido de gente, por la calle contigua al Zocalo de esta ciudad, al ayuntamiento, dignifica después de todo un tiempo de mandato, de primera presidenta mujer que asume el ayuntamiento. Acá en Mexico no se los llama como allá "intendentes", sino "presidentes" municipales. Y hablando de presidente, ayer justo nos decían que el pueblo se había revolucionado por la visita de Felipe Calderón, el otro y estatal presidente.

martes, 1 de febrero de 2011

Oaxaca. Puerto Escondido.

A la capital del Estado de Oaxaca y del mismo nombre, llegamos tempranisimo, cerca de las 7 de la mañana, en viaje desde Cuautla, tierra de Don Emiliano. El vieje fue pesado: muchas vueltas, mucho movimiento, pero al final dimos con la ciudad patrimonio de la humanidad.
Oaxaca (o "guajaca", en mexicano básico) tiene encanto. Nos hospedamos en el barato Hotel Típico, calle 20 de noviembre Nro 612, frente al Mercado de 20 de Noviembre (el mercado de los platillos oaxaqueños), que junto al otro Mercado Benito Juarez (de frutas y productos básicos) hacen los dos principales merodeos de mundo en esta parte de la ciudad.

viernes, 28 de enero de 2011

Cuautla. Anenecuilco.

Cuautla, heroica e histórica, es un engambre de gente a las cuatro de la tarde, donde apunto unas lineas. Donde la asaltan sus ferias precarias y su recorrer de pueblo. El Hotel Colonial (Jose Perdiz Nº 18) es algo raro, entre otras de las rarezas de este viaje. Es un edén (con alberca, mesitas y palmeras) en plena terminal, lo que es decir, un edén en pleno lío de Constitución. No lo disfrutamos tanto como a la ciudad, ya que el tiempo apremiaba.
Cuautla fue la ciudad del héroe de la independencia Jose Maria Morelos, que da nombre al Estado. Su "Sentimientos de la Nación" fue el documento expuesto por Morelos en el temprano 1813 en Chilpancingo, y que expone visionariamente una serie de principios, entre ellos que "La América es libre e independiente de toda otra nación". Pero es también la ciudad cercana a Zapata, junto a la más exacta Anenecuilco, su pueblo natal, a escasos 15 minutos de Cuautla, sentido al sur. Artifice principal de la Primera Revolución social moderna del mundo, allá en 1910, junto a Doroteo Arango, conocido como "Pancho Villa".

jueves, 27 de enero de 2011

Corrido de Emiliano Zapata

San Miguel de Allende y la ruta de Emiliano

Llegamos a San Miguel Allende, el "corazon de Mexico", a las cuatro de la tarde, caminando a mochila limpia la calle arriba hasta su Plaza Principal. A la hora que cae la tarde, recorrido de feretro y peregrinar de un sepulcro, de pueblo, por la calle lateral, mientras nos comemos unas quesadillas para engañar al estomago. Nos hospedamos en la "Posada San Sebastian", cerca de la Plaza de la Soledad, tan vieja como esta ciudad, rojiza y despintada, de empedrado desgastado, y macizo. Los últimos instantes de sus paredes rojizas, de sus balcones enrejados, antes de caer la tarde, suenan las campanas de la hermosisima Parroquia de San Miguel Arcangel.
Despidiendo los últimos momentos de la tarde que quiere eternizarse, en esta ciudad corazón, nos tomamos unas cervezas frente a la magestuosidad de tu pasado y parque.

miércoles, 26 de enero de 2011

Inmensidad y Mexico DF

Se escriben estas líneas camino a Guanajuato, camino a San Miguel de Allende, en un rapto de carretera rumbo norte y la ciudad de Querétaro en el horizonte. Cambiamos recorrido hacia el norte y no la baja del sur, a la recomendación de Cecilia y de nuestros mexicanos amigos. Esperamos que alcancen al alterado plan y lo mejoren. Pera ahora quiero hablar de la inmensidad. Quiero hablar de la ciudad de México. Que de tanto me dejo casi mudo.
Para ello habrá que decir, cual primero, como todo relato de apuradas, que salí de Buenos Aires en vuelo de Lan sin problemas a la vista, lo que ya es mucho decir para mis recorridos y mis siempre-eternos problemas de aviones. Ni bien llegue a la escala de Lima, ya hicimos nuestra primera humorada de viaje. Me tenía que encontrar en el Aeropuerto con Guillermo que venía de Cuzco, así que hable con un peruano del Aeropuerto fingiendo que estaba preocupado porque no encontraba a mi amigo. La conclusión fue que por los altoparlantes del Aeropuerto Chávez de Lima se escuchó llamarse a un tal "Guillote Navarro" (les dije que tenía apellido doble). "Sr. Guillote Navarro, favor de apersonarse. Lo esperan en la puerta número 21". Tenían que verlo llegar a Guille...

lunes, 17 de enero de 2011

A Mexico

A horas de partir una vez más. A los privilegios de la vida. A la tierra hermana que vislumbré algún día en escasos pero intensos momentos con mi primo Leo. A México viajamos en 1999. En aquella oportunidad al Acapulco del pacifico, costera y clavadistas. Recuerdo que en aquel viaje conocimos a Andrés y a Nazareno, amigos que no nos abandonaron jamas. Y al loco de La Plata, Fernando, todo un personaje que merece relatos por separado y que no volvimos a ver.
Por eso el plan de viaje que hicimos con Guillote expresamente excluye esa ciudad maravillosa de la Tía del Super Agente 86 y pretende hacer sur. Sur de México, ruta de Emiliano Zapata, Puerto Escondido, Tabasco, Campeche, Oaxaca, para terminar en las turísticas playas de la Rivera Maya, sin olvidarnos de la hermosa Merida y del Df, puerta de entrada a los misterios del este país de recuerdo tan grato. Esperemos que el tiempo alcance, que pueda escribir las impresiones (más y) mejor que un año atras en mi enamorada Colombia y que las maravillas de los dioses del viajar comiencen su grata y silenciosa labor de magnetizar las almas desde este viernes 21 de enero, cuando sale el vuelo que me encontrara con Guille (hoy en Perú) en el DF. Sabiendo "que no hay que llegar primero, pero hay que saber llegar". Y con el mismo Vicente Fernandez, para que "aquellos mariachis y aquel tequila, nos haga llorar". Saludos mis juates!.